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La obra que el lector tiene en sus manos -"Derecho de Familia"-, prosigue la línea de reflexión de los manuales precedentes del compendio de Derecho Civil. El carácter de la obra pretende una aproximación razonada y razonable de los problemas que la aplicación del Derecho, y en este caso, de las categorías jurídicas en el ámbito del Derecho de Familia, suscita, tanto en su reflexión jurídica, como en su aplicación práctica, fundamentalmente en el ejercicio de la profesión. No hay que olvidar que la promulgación de la Constitución de 1978, provocó las reformas más intensas y extensas precisamente en el derecho de Familia, y más en concreto, desde 1981 hasta nuestros días, no ha dejado de provocar al legislador continuas y progresivas adaptaciones legisladas en el ámbito de las relaciones jurídicas familiares. El libro quiere cumplir una doble finalidad; por un lado una eminente didáctica y pedagógica, y en este sentido, se ha procurado conjugara la necesaria labor conceptual con la necesaria y conveniente "complicidad", de la aplicación práctica. Ya nos recordaba Séneca que "lento es enseñar por teorías, pero breve y eficaz por el ejemplo". Es así que no nos interesa para nada un innecesario desarrollo doctrinal, si no viene acompañado de una praxis, en donde se materialicen soluciones efectivas a los problemas dogmáticos. Sólo corremos el riesgo, como diría Ihering de navegar en "El cielo de los conceptos jurídicos". El destinatario natural que es el alumno, con esta obra comprenderá el sentido que tienen en el orden jurídico familiar las palabras legislación, derecho, jurisprudencia, etc. es así que, la legislación se eleva a los principios, fija las teorías, examina los sistemas, compara las instituciones familiares. El Derecho de familia contiene las reglas positivas que el legislador establece. La Jurisprudencia nos enseña a aplicar es tas reglas en todos los negocios jurídico-familiares. En conclusión, es misión del docente enseñar que la legislación es una regla especulativa, el Derecho una institución y la Jurisprudencia una ciencia práctica. La legislación es la guía del legislador, el Derecho y la Jurisprudencia, la del jurisconsulto, y es aquí donde el esfuerzo de nuestra obra, cobra un interés y atención más notable, dado que el motivo que nos anima es razonar respuestas válidas para el aplicador del Derecho (jueces, abogados, etc.). Agradezco la valiosa y sabia participación de mi colega, amigo y gran profesional de la Notaría Javier Gimeno Gómez-Lafuente, quien ha enriquecido con sus reflexiones el contenido de nuestro libro.
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