La importancia creciente de la producción reglamentaria, tanto en cuanto a su volumen como a su incidencia en las condiciones de vida de los ciudadanos, redobla la necesidad de establecer fórmulas eficaces para su control jurisdiccional. El principio de legalidad y, en último término, los derechos y libertades de los ciudadanos dependen íntimamente del grado de eficacia de estas fórmulas, eficacia que se cifra en su virtualidad para permitir la definitiva expulsión del ordenamiento jurídico de los reglamentos que incurran en ilegalidad

Consciente de ello, la Ley de la Jurisdicción Contencioso-Administrativa de 13 de julio de 1998 ha querido reaccionar frente a la insatisfactoria situación dibujada por la Ley de 1956 y, sobre todo, por la jurisprudencia que la aplicaba, incorporando al sistema de control contencioso-administrativo de los reglamentos novedades de calado. Entre ellas destaca un nuevo procedimiento, la cuestión de ilegalidad, que es analizada de forma exhaustiva por esta obra, elaborada por la Profesora Titular de Derecho Administrativo de la Universidad Complutense de Madrid.

Para facilitar la comprensión del sentido y alcance de este nuevo mecanismo, el libro se abre con una Primera parte en la que se estudia la evolución del control judicial de los reglamentos ilegales en nuestro reglamento, cuyas carencias explican el nuevo modelo instaurado por la Ley de 1998. Sobre estas bases se hace posible estudiar, en la Segunda Parte, las circunstancias –subjetivas, objetivas y temporales- que perfilan el ámbito de aplicación de este procedimiento y su incardinación en el sistema