Colección Prevención de Riesgos y Calidad Ambiental

Si bien es evidente la conexión epistemológica entre el «Derecho del Trabajo» y el ámbito de la «prevención de riesgos laborales y la calidad medioambiental», no es, ciertamente, tan usual que esa calidad medioambiental venga referida al propio Derecho del Trabajo, entendido éste como medio ambiente. En este libro es la misma relación laboral, y las relaciones laborales en su conjunto, las que se analizan desde el punto de vista de la calidad ambiental. Lógicamente se piensa en un Derecho vivo, en unas relaciones laborales dinámicas y, sobre todo, en un enfoque interdisciplinar.

Constituye este libro un segundo paso, tras nuestro trabajo «Repensar la justicia social» (publicado por Thomson-Aranzadi en 2008), en el que se proponía la teoría de la justicia relacional. En aquel libro y en éste se parte del enfoque relacional, aplicado al Derecho, siendo aquí donde dicho enfoque se presenta claramente en el contexto de las relaciones laborales. Así, acerca de la teoría de la justicia relacional, supone este trabajo un segundo paso, que posee a su vez una doble faceta. En primer lugar, la relación (relación jurídica y, más concretamente, relación jurídico-laboral) es presentada como uno de los tres elementos de dicha teoría (eje de reciprocidad, eje de vinculación y relación). Y, en segundo lugar, desde el punto de vista de la justicia relacional, se descubre un análisis de la relación laboral que coincide con su grado de calidad ambiental. De ahí el título: «Calidad ambiental de las relaciones laborales». En la conexión entre la justicia social (justicia relacional) y el enfoque relacional del Derecho del Trabajo, prevalece como hilo conductor la calidad ambiental de la relación laboral —y de las relaciones laborales, como sistema—.

De los tres capítulos en los que se estructura el libro, el primero de ellos presenta el contexto relacional del trabajo humano dependiente, siendo enfocado el vínculo de dependencia como construcción relacional, que puede derivar hacia estructuras sociales de dominación o reequilibrarse hacia posiciones de interdependencia. De ahí el interés que supone la profundización en la teoría de los bienes —o males— relacionales. El segundo capítulo aborda las relaciones laborales en su reticularidad, analizándose en él distintos fenómenos que en la actualidad se perciben en el sistema de relaciones laborales, considerado éste como una dinámica compleja que obedece al paradigma de red. Estos nuevos fenómenos (mayor personalización y autonomía de la relación laboral, suprafuncionalidad del diálogo social, humanización del contrato y de los derechos del trabajador, redimensionamiento de los derechos sindicales, subsidiariedad como reciprocidad y centralidad de la empresa) constituyen una explicación previa, a nivel global y colectivo, acerca de las condiciones que pueden facilitar o no la calidad de la relación laboral. Por último, el capítulo tercero aborda lo que pueda considerarse un «ambiente relacional de calidad», partiendo de la teoría de la justicia relacional, después de haber expuesto que las relaciones analizadas son propiamente relaciones de mercado. Se concluye el capítulo —y el libro— analizando cuáles pueden ser los elementos y circunstancias capaces de generar —o impedir— una relación jurídico-laboral de calidad (o unas relaciones colectivas de trabajo), insistiendo en que es en la propia relación en la que se puede experimentar —o no— una calidad ambiental suficiente; es la calidad ambiental de la propia relación la que permite hablar de justicia relacional.

Es, finalmente, un trabajo deliberadamente inacabado, susceptible de mayor profundización y concreción, lo cual, desde el enfoque relacional, sería deseable llevar a cabo desde el diálogo académico —respecto del cual este libro podría verse como una propuesta—. Un segundo paso, pues, susceptible de pasos sucesivos. Un conjunto de ideas abiertas a la reflexión interdisciplinar.