La liberalización comercial ha alcanzado plenamente al ámbito de los servicios, tradicionalmente regulados y poco expuestos a la competencia exterior. Sin embargo, los procesos de apertura comercial emprendidos en el ámbito internacional han demostrado recientemente que esta tendencia a la desregulación no puede llevarse a cabo sin la debida salvaguarda de valores sociales importantes, como la protección de la salud, de los consumidores, del medio ambiente, etc., valores que están en la base del concepto de "interés general".
El presente libro analiza desde esa perspectiva los procesos de liberalización comercial con más trascendencia en el plano del Derecho internacional y comunitario en materia de servicios. Se estudia de manera comparada la reglamentación surgida en la Organización Mundial del Comercio, en concreto con el Acuerdo General sobre el Comercio de Servicios o GATS, así como el Mercado Interior comunitario en lo atinente a la libertad de prestación de servicios, incluyendo la crucial jurisprudencia del Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas sobre las razones imperiosas de interés general. Esta investigación pone de manifiesto la importancia que ha adquirido el "interés general" en el plano internacional y comunitario, donde se configura como el concepto jurídico clave. Se trata de un concepto funcional que permite la realización del principal objetivo de la reglamentación analizada, esto es, la consecución de una mayor liberalización del comercio de servicios pero, en la medida en que no se ponga en peligro la necesaria defensa de una serie de valores considerados socialmente importantes, valores todos ellos que nutren el concepto de interés general.